Qué privilegio fue de poder predicar en la Iglesia Pentecostal Nueva Vida en Covington, La. Hubo un tremendo mover del Espíritu Santo! Aleluya!
El Pastor y su congregacion fueron tan amables y me hicieron sentir como “en casa.” Fue un tiempo muy especial!
Doy Gloria al Señor Jesús por todo lo que hizo!